LOS TRES FILTROS

Un día llegué de mi trabajo preocupada por comentarios y actitudes que molestaban, mi madre que era muy sabia me miró a los ojos y preguntó ¿Qué ocurre? Y  le conté lo que pasaba  y como era fiel lectora me dijo: busca en tu pc un cuento Los tres Filtros y después hablamos, lo busque y decía:

Un discípulo llegó muy agitado a la casa de Sócrates y empezó a hablar de esta manera:

– “¡Maestro! Quiero contarte cómo un amigo tuyo estuvo hablando de ti con malevolencia…”

Sócrates lo interrumpió diciendo: -“¡Espera! ¿Ya hiciste pasar a través de los Tres Filtros lo que me vas a decir?

-“¿Los Tres Filtros…?”

-“Sí” – replicó Sócrates. El primer filtro es la VERDAD. –“¿Ya examinaste cuidadosamente si lo que me quieres decir es verdadero en todos sus puntos?”

-“No… lo oí decir a unos vecinos…”

-“Pero al menos lo habrás hecho pasar por el segundo Filtro, que es la BONDAD: ¿Lo que me quieres decir es por lo menos bueno?”

-“No, en realidad no… al contrario…”

-“¡Ah!” – Interrumpió Sócrates.- “Entonces vamos al último Filtro. ¿Es NECESARIO que me cuentes eso?”

– “Para ser sincero, no…. Necesario no es.”

– “Entonces -sonrió el sabio- Si no es verdadero, ni bueno, ni necesario… sepultémoslo en el olvido…”

Cuánta razón tenía mi madre  me preocupaba por nada , entonces me dije déjalos hacer lo que quieran y decir lo que tengan ganas , llené mi ser de paz y miré de lejos todo lo que iba ocurriendo y cada vez que veo algo malo recuerdo el rostro de mi madre que me dijo SEPULTEMOSLO  EN EL OLVIDO.